Mar salvaje… ola que sumerge esta cabeza
bajo la capa de sal de un camino blanco marcado de huellas y pasos
que tan sólo fueron algunos más de mis fracasos…
Búsqueda innata de un sustento..
un grito desesperado en ese inmenso mar que me desboca…
Un chaleco salvavidas que poder agarrar, romper y soltar…
Sin duda, el único impulso para salir del camino salado
es buscar en otro lado… es lamer la sal… de otra piel..
Mi propia piel… saciándola de todo aquello que perdió en su lucha por no ahogarse…
He aquí, un camino aun no marcado..
aun no condenado por otro desventurado…
Tan sólo yo, el camino.. y la sal…
A veces no sabemos cuanto durará el dolor…
no sabemos cuanto nos perseguirá…
pero si hay algo bueno en todo dolor humano es que siempre se va.
Como ahora lo hago yo.
Porque hay miles de formas de amar.. pero yo solo se amar de una…
Lo bueno del dolor es que acaba desapareciendo 😉 (las pelis de Colin siempre enseñan algo bueno jajaja)
sip ^^